sábado, 2 de abril de 2011

LAS UVAS DE LA IRA



"El más impresionante retrato de la depresión que asoló los Estados Unidos en los años treinta viene firmado por la mano maestra de John Ford. Un canto a la solidaridad. Cotidiana, lírica y comprometida, una película inolvidable, necesaria y magistral" (Miguel Ángel Palomo: Diario El País)


 Cuenta la aventura de los miserables, de los oprimidos, los que por desgracia o fortuna se ven obligados a vivir vagando en pos de la dignidad en sus vidas.
Todo se resume en las inolvidables frases que Tom Joad refiere a su madre antes de partir por última vez: "... Allí donde haya un policía pegando a un muchacho, allí donde un recién nacido llore porque tiene hambre, allí donde haya una lucha contra la sangre y el odio en el mundo, mírame allí mamá porque allí estaré. Allí donde haya alguien luchando por asentarse en algún lugar, o por un trabajo decente o una mano amiga, allá donde haya alguien que luche por la libertad, mira en sus ojos mamá porque allí estaré yo...".



Un western moderno (un viaje al oeste en busca de trabajo y bienestar), realista, ya en la era del automóvil, durante la Gran Depresión en los años 30 y la sequía ("Dust bowl", o tormenta de polvo) que asoló Oklahoma simultáneamente. Una película perfecta, en blanco y negro, de 1939, un melodrama que impacta como tal (emocionalmente) a causa de las penurias sufridas por una familia (y miles de otras) que sin un mendrugo de pan que llevarse a la boca, no tienen más alternativa de ponerse el mundo por montera. Con unos campos que ni valía la pena trabajar, no había ayudas al campesinado y tuvieron que emigrar para tener un futuro de jornalero explotado.
Hoy en día me pregunto por lo que estamos viviendo estos días y aunque quiera no puedo encontrar paralelismos porque no estoy en esa situación. Aunque si advierto por llamadas a la radio en algunos casos la misma desesperación que la que podía haber tenido cualquier familia que se hubiese visto en la situación de la cinta.




Este film, cada día gana más adeptos, sobre todo desde que ha salido en formato digital. Habla de la vida misma, y de hechos reales. John Ford, en ciertos momentos utiliza un tono documental o pseudo-documental, sólo permeabilizado por las emociones que emanan de los protagonistas de esa realidad.
Tom (Henry Fonda) sale de la cárcel, y descubre que para su desgracia existen fuera de esos cuatro muros otros tantos en el exterior que no dejan respiro. Cuando entra en la cárcel vivía en la Norteamérica de la bonanza económica, la bonanza de los años 20, y cuando sale y se reinserta en el mundo libre, tiene que hacerlo en la gran depresión fruto del crack del Down Jones en 1929. Los ánimos estaban más exaltados, no era un tiempo fácil para forjar modelos o héroes. Sin embargo, aun considerando a Tom, un hombre con manchas pues es exconvicto, hace ver, que Ford, lo que quiere es presentar a un hombre normal, representante de la gente buena, corriente, sencilla, que sufre inpertérrita la impotencia de ver como hasta los más primarios derechos les son denegados en favor de los poderosos que siempre los han explotado. 




Ahora es cuando viene la parte del cine que más me gusta, donde lo imposible, se hace realidad. Y esta vez, la pifia es gorda, y no es de la cinta ni del director, si no de la Unión Soviética. Ya sabeis que la censura de las películas americanas en la Unión Soviética era terrible, pero es que en 1940, un año después del estreno de “Las uvas de la ira”, permitieron su estreno y difusión en la tierra de los antiguos Tzares. Supongo que ya os imagináis porqué, ponía en evidencia el sistema capitalista y el declive de la sociedad norteamericana. Las autoridades encantadísimas. Bueno, claro, hasta que el público en la Unión Soviética se enteró, que en América, la familia más paria, más pobre, podía permitirse ser propietaria de vehículo propio. Ja, ja, ja. Aún estoy viendo la cara de póker que tendrían los mandatarios.
Bellísima fotografía, actuaciones inolvidables, parlamentos de gran fuerza, situaciones propias de un cataclismo social. Un comentario a menudo repetido dice. "Una de las más grandes películas de todos los tiempos". No debe trivializarse su grandeza haciendo lecturas tendenciosas de intenciones políticas, si eso es posible. Es una obra acerca de la esperanza y la resistencia, acerca de la necesidad, acerca de la "condición humana".




Adaptación de una novela de John Steinbeck (1939) hecha por Ford, casi fiel a la obra homónima, pero con el cambio del final, para hacerla más digerible en cine, que el final primitivo y demoledor que Steinbeck había ideado.
Me ha parecido oportuno rescatar esta película en la situación actual, económica quiero decir, porque siempre nos ofrece algo en qué pensar.
También me pareció oportuno rescatar esta entrevista con Ignacio Julià hecha al jefe, Bruce Springsteen
“Mi vida fuera de la música fue muy vulgar hasta que un día alguien me recomendó Las Uvas  de la ira, una película de John Ford que pasaban aquella noche por la tele. En América, cuando pasan una película en blanco y negro todo el mundo cambia automáticamente de canal. Yo mismo había cambiado de canal varias veces al principio de Las Uvas de la Ira, pero aquella noche la vi y esa película despertó mi curiosidad por enterarme de las cosas, por leer libros, ver películas. Comencé a ver todas las películas de John Ford, los westerns y todo eso, y me enseñaron mucho más sobre la historia de mi país que todos mis años de escuela juntos” B.S.

28 comentarios:

Mario Salazar dijo...

Debe ser una belleza de película pero primero quiero leer la obra maestra de John Steinbeck, es un libro imprescindible como la película pero me anima primero el libro porque cuando es al revés ya no quiero leerlo porque ya todo lo sé y en cambio el cine recrea una nueva aventura, de todas formas pienso luego verla porque en todas partes leo maravillas. Sobre la anécdota de que el más pobre americano podía darse el lujo de tener un viejo auto me ha causado gracia, imagino que sentirían una cierta envidia del llamado sueño americano que es real pero son muchos los que no lo alcanzan si bien existe. Estupenda reseña como siempre. Un abrazo.

Mario.

Cinemagnific dijo...

Hay algo que no me gusta de esta peli, y a pesar de ello jamás negaré que es una obra maestra: termina a la mitad del relato original de Steinbeck y dando un mensaje mucho más esperanzador y positivo de creencia en el sueño americano. La obra de Steinbeck, a pesar de su mensaje también de fraternidad, termina con toda la familia hundida en la miseria más absoluta. Creo que a Ford no le hace nada bien suprimir ese final. Pero, sin embargo, la película es genial de princpio a fin, eso nadie lo niega. Pero podría haber sido redonda.

Emilio José Pazos Brenlla dijo...

Cinemgnific@ Sí, coincido contigo en valorar la novela mejor que la película. También es neceario saber que John Ford, se vió obligado a edulcorar el final a causa de los estudios que bajo ningún concepto podían aceptar el desenlace de Steinbeck.
Pero bueno, a los dirigentes de la URSS, les hubiera encantado el final de Steinbeck.
Un saludo.

Susan Lenox dijo...

La película es mágnifica, pero la nóvela es soberbia, es cierto lo qué dices que John Ford
se vió presionado a cambiar el final de Steinbeck.
Mira mw han dado ganas de volver a verla.
Eilio, te invito a que visites ni recien estrenado blog, si te apetece....

Un saludo.

Steppenwolf dijo...

No he visto la película, pero con tu crítica ya he empezado a montar el escenario.
Un saludo Emilio

Emilio José Pazos Brenlla dijo...

Steppenwof@ Seguro que no te defrauda. Tu pseudónimo tiene sabor a viejo roquero.

Susan Lenox@ Totalmente deacuerdo contigo, y aunque me gusta Steinbeck a rabiar, en este blog el tema es el cine y como tal lo tengo que exponer en la entrada, aunque lo podamos comentar luego. Steinbeck forever. Un saludo a los dos.

Anónimo dijo...

Hola amigo: Te felicito por tu blog, excelente selección de títulos, comentarios, fotos y presentación. ¡Enhorabuena!
Arvikis

Antonio Fernández López dijo...

Lo primero, gracias por tu entrada. Te la devuelvo como buen vecino y te invito a que sigamos compartiendo comentarios, Mi actividad dosente comenzó en un cineforum precisamente, allé por el año 1967 o algo así. Recuerdo, sobre todo CANDILEJAS, AMÉRICA, AMÉRICA, esta misma de LAS UVAS DE LA IRA, EL LOCO DEL PELO ROJO y tantas maravillosas.Un abrazo

V dijo...

Saludos Emilio.La considero una de las capillas sixtinas del cine. Hay quien disfruta más de optros Ford por que tienen más sentido del humor. Aquí estamos ante un auténtico poema visual, una obra cumbre que no admite discusión alguna. Un saludo.

Emilio José Pazos Brenlla dijo...

RAICESDEPAPEL@ gracias por pasarte.

ANTONIO FERNÁNDEZ LÓPEZ@ LA AFICCIÓN POR EL CINE ME VIENE DE MI PADRE. LOS CINECLUBS, SON CUNA DE CRÍTICOS Y UNA BUENA FORMA DE ACCESO A LA CULTURA. UN ABRAZO

V@ No sé si es una obra como la capilla sixtina pero la dignidad que Dios da al hombre, es uno de los temas de la película y el cuadro.

Un saludo a todos

Cristina dijo...

No he tenido nunca la oportunidad de verla, aunque siempre he leido muy buenas críticas sobre ella, y sobre todo de la actuación del gran Henry Fonda. Voy a intentar conseguirla...sería casi un pecado no visionar una película de estas características.Un abrazo, y gracias por visitar mi blog.

Emilio José Pazos Brenlla dijo...

SqSmaravillosa@ Es una película que dificilmente defrauda, entre otras cosas porque el guión es el de la novela de Steinbeck

La Guionista Reflexiva dijo...

Es una de esas películas que disfrutas más cuantas más veces la ves. Me encanta.

María dijo...

¡Qué gran actor Henry Fonda! he visto muchas de sus películas, pero tengo que decirte que ésta no la he visto.

Gracias por visitar mi blog.

Saludos.

Emilio José Pazos Brenlla dijo...

María@ Gracias por pasarte. Pues si te gusta Fonda, esta es la película. Un saludo.

Javier Simpson dijo...

Steinbeck, un grande. No leí la novela que adapta Ford a su peli Las uvas de la ira, pero, La perla, de este autor, me había encantado. Me gustaría leer algo más de él, y lo haré...
La peli es una de las buenas de Ford, y con eso debería quedar todo dicho. Habla sobre los desheredados y la lucha por su dignidad, por conseguir una oportunidad en una tierra, y una época, llena de granujas sin principios. Una maravilla. Tengo que volverla a ver que ya hace...
Muy buen post, Emilio. Ciao.

Fernando R. Genovés dijo...

Maravillosa película del más grande director de todos los tiempos: John Ford. Destacaré ahora sólo dos aspectos de esta obra maestra: la fotografía de Gregg Toland, perfectamente integrada en la puesta en escena del maestro. Y la escena de la madre (Jane Darwell), al abandonar la casa, frente al espejo, probándose los pendientes, echando una mirada a toda su vida, que van a dejar atrás. ¡He ahí un ejemplo, entre miles, de la maestría de Ford!

Muy divertida la anécdota que cuentas del celo soviético por "lo social".

Salucines

Pilar Abalorios dijo...

Una gran novela y una película magistral, casi incluso mejor.
La luz, sin duda un protagonista más.

Un cordial saludo

Humberto Dib dijo...

Hola, Emilio, estoy visitando espacios que aparecen en la lista de seguidores de otros blogs amigos. Éste me pareció muy intereante, voy a quedarme por aquí como seguidor, si me permites.
Si tienes ganas (sólo si tienes ganas), te invito a pasar por el mío.
Un saludo desde Argentina.
Humberto.

www.humbertodib.blogspot.com

La sonrisa de Hiperion dijo...

Pero que chulas las fotos...

Saludos y un abrazo.

ethan dijo...

Casualidades del mundo bloguero: ayer hablaba del paso del tiempo por las películas. De la vigencia de su discurso; y de la calidad. En esta peli del maestro se cumplen ambas y por eso sigue siendo tan actual.
Saludos!

Emilio José Pazos Brenlla dijo...

Hola, gracias a todos, estoy un poco agobiado por exámenes, pero volveré...
Un saludo.

Saraiba dijo...

Que buenísima película!! Me encantó recordarla porque es sin duda una gran obra.

efa dijo...

Realmente otro gran artículo, vi la peli, quizás como la tenía incluida en bibliografía obligatoria no la valoré tanto, je, pecado de juventud.
Salud

Emma dijo...

Toda crítica es constructiva, empezando por uno mismo y pasando por las pelis, por esas pelis que expones en tu blog, que son un tesoro.
Yo también me quedo por aquí, Emilio ;-) Nos vemos... Un beso =)

Dickson dijo...

La trastienda del capitalismo en estado puro. Estoy convencido de que Ford hubiera sido un ameno profesor de Historia.

Enhorabuena por el blog. Ya te sigo y te tengo en el blog roll del mío, al que estás formalmente invitado. Saludos.

Emilio José Pazos Brenlla dijo...

efa@ Es bueno revisitarnos de vez en cuando y subsanar esos pecados de juventud. Ja, ja. Es broma. Un saludo.

Emma@ Gracias por el cable, y espero que sean el tesoro de todos. Un saludo.

Dickson@ De hecho Springsteen lo considera el mejor profesor de historia norteamericana que ha tenido. Un saludo.

jorge riaño dijo...

Pues tendré que verla...