sábado, 15 de enero de 2011

MUERTE ENTRE LAS FLORES



"Los Coen reinventan el cine negro en este filme sorprendente y virtuoso (...) película viva y apasionada (...) una obra maestra" (Miguel Ángel Palomo: Diario El País)

"Maravillosa, deslumbrante" (Carlos Boyero: Diario El Mundo)

La obra maestra de los Coen, seria, alejada del típico cachondeo que se desprende a raudales en el cine de éstos hermanos y sus habituales actores.  “Muerte entre las flores” En contraposición con “El gran Levobsky” con la que guarda cierta relación  temática, pero la primera cinta  es una película de peso en el género de cine negro, mientras que la otra es una comedia, una parodia del mismo mundo de la mafia, y a su modo, también genial.
Quizás el éxito más salientable de esta cinta es el haber preservado todo el olor a película del viejo Hollywood, pero manteniendose honesta y sin ningún adorno para la galería que estuviese fuera de lugar. Me parece todo un acierto esta fidelidad al género, pues no es muy frecuente el respeto de los clásicos, a excepción de ejemplos ya mencionados en esta bitácora, como es el caso de “Chinatown”
Esta es la tercera cinta de Joel y Ethan Coen, pero es la primera donde realmente han alcanzado renombre, luego se inmortalizaron con “Fargo”, “El gran Lebovsky”, “El hombre que nunca estuvo allí”, hasta la más reciente “Este no es país para viejos”.


En todos estos largometrajes puede verse un estilo definido, irónico e histriónico por momentos, pero muy diferente a la oferta de aquella época. Los hermanos Coen  podrían haber sido de la misma generación que aquellos realizadores, que temerosos a no superar “El padrino” tampoco se atrevieron a seguir indagando sobre el género. Los Coen, en este sentido eran unos valientes, pocos se atrevían, quizás Martín Scorsese aparte, porque ya era considerado un grande en el año que se presentó Muerte entre las flores, además al año siguiente estrenaría Uno de los nuestros. Los hermanos Coen eran unos atrevidos por estas y otras cosas, empezando porque venían de realizar una película de índole contraria y no creo que los estudios se tomasen muy en serio el proyecto desde un principio. Para más extrañeza, el humor negro que caracteríza a estos directores, sus puestas en escena demasiado oníricas para la época, aunque no me negareis que la escna del sombrero mecida por el viento mientras recorre la senda cubierta de hojas, no es de una belleza plástica inigualable.
La historia cuanta una trama de amor, celos y traiciones relatadas de manera atípica, por esa misma razáon, no entendemos la misma en toda su complejidad hasta bien entrada la segunda parte. Tom es la mano derecha de Leo, pero comete un error inperdonable, enamorarse de la misma mujer que el jefe, con lo que inicia una disputa en la sombra, siempre silenciosa, pero con dudas, porque en el fondo tenía un gran afecto por Leo que era amigo de muchos años atrás.El mafioso celoso declara la guerra a Tom que tiene tratos con los italianos...  en fín, seguro que notareis una forma un tanto peculiar de narrar una película de cine negro.



Todos rayan a una gran altura interpretativa. Gabriel Byrne no tiene nada que envidiar a los clásicos Al Pacino, Robert de Niro, etc... de Finney no hay nada más que decir,  salvo que está incontestable en su papel, a gran altura y proporcionando unos rasgos difenentes a los de Marlon Brando. Aunque para mí, el gran descubrimiento y sorpresa de esta película ha sido la importancia que ha cobrado el chivato, que en "El padrino" sería despachado sin más, aquí  goza de un espacio donde poder expresarse,  ofrece respaldo en las motivaciones y sentimientos de los protagonistas y además nos demuestra como una buena interpretación puede dotar a un personaje de un cierta humanidad, siendo una rata y realizando acciones de la más baja calaña. El actor que interpreta a este personaje excéntrico e histérico, es  John Turturro, el actor más carismático de la cuadrilla de los Coen. De escenas sombrías y una oscura fotografía que rememoran el ambiente del mejor cine negro. Un lujo. La mejor película del año. Un momento memorable, Turturro suplicando perdón en Miller's Crossing.


1 comentario:

diana moreno dijo...

efectivamente, creo que gabriel byrne está muy infravalorado .. para mí supera a al pacino, qué enorme papel, ese tom reagan, mi preferido de todos los personajes de los coen.
aunque yo me quedo con turturro también. qué grandísimo actor. una de las mejores escenas del cine, la que señalas.